Maldivas a otro nivel

En muchos sentidos, tras Soneva Fushi y Soneva Jani, el tercer resort de Soneva en Maldivas ha llegado donde pocos lo han hecho antes, y hemos tenido el placer de estar entre los primeros españoles en poder experimentar Soneva Secret 2024.

El hotel está plenamente operativo desde principios de octubre de 2024, listo para ofrecer a sus visitantes una experiencia inolvidable, mezcla de lujo, naturaleza y cultura polinesia.

A hora y cuarto en hidroavión de Male, esta isla-resort únicamente comparte el atolón más occidental de Maldivas con la isla local de Makunudhoo. Eso ya da una idea de lo espectacular de su fondo marino virgen. La ratio de personal por huésped tampoco tiene parangón, ya que cada una de sus 14 villas ultraprivadas cuenta con dos mayordomos dedicados en exclusiva a esa villa, y solo a esa. Una cocina totalmente equipada permite a su equipo de 14 chefs de otras tantas nacionalidades preparar deliciosos platos, desde una saltimbocca italiana a auténticos tacos al pastor, pasando por un festín cantonés. Y todo ello, en la privacidad de la villa.

Cada gigantesca villa, sobre el lagoon o sobre la playa, de una o dos habitaciones (más un “cuarto secreto” con baño propio para los niños, ideal para familias) cuenta, además, con su propio gimnasio personalizable, juguetes acuáticos, tobogán (en sus overwaters) e incluso su propia sala de masajes. Si se dejan las puertas escamoteables abiertas y se abre el techo retráctil a toque de un botón, se puede dormir al aire libre, con el rumor del agua de fondo y las estrellas sobre uno.

La tirolina más larga de Maldivas atraviesa el lagoon y conduce a Out Of This World, la torre gastronómica donde el joven chef brasileño Henrique Lork dirige una íntima obra maestra de la gastronomía que cruza culturas, y en el que una cena no es una cena, es un viaje por los sentidos.

Muy pronto habrán acabado de construir la Castaway Villa, la primera villa flotante del archipiélago, que se podrá amarrar en distintos puntos del lagoon para que sus huéspedes puedan contemplar el amanecer y el atardecer desde su propia terraza. 

Y a pesar de todas sus cualidades superlativas, lo que impera en todo momento en el resort es el ya emblemático no news, no shoes que instauró Soneva hace casi tres décadas.